La productora de energías renovables Greenalia publica su memoria anual de sostenibilidad, una nueva edición en la que se incorporan dos novedades. Por un lado, incluye por primera vez el reporte financiero y no financiero, un paso más en el compromiso de la compañía para una mayor transparencia y claridad desde una perspectiva transversal y, en segundo plano, se añade la modalidad interactiva para una más ágil lectura.
Se trata de un documento en el que se recogen los principales hitos de la empresa en materia financiera y desde una perspectiva sostenible. En este sentido, destaca la reorganización del Consejo de Administración, con el nombramiento de nuevos consejeros y la entrada de la dirección de sostenibilidad en este órgano de gobierno.
Un ejercicio en el que se han dado pasos importantes en el programa de Compliance, gracias a la aprobación del Green Book -libro de políticas corporativas-; la ratificación del Código de Conducta y Buenas Prácticas Corporativas y la puesta en marcha del Canal Responsable. Unas herramientas que permiten avanzar en la consolidación del programa de cumplimiento normativo, lo que significa un paso más en la implementación del código ético que rige el proyecto empresarial de Greenalia.
En materia ESG, se ha continuado impulsando el Plan de sostenibilidad (ESG) 2019-2023, en línea con la estrategia de crecimiento de la compañía basada exclusivamente en proyectos de energía renovable que contribuye de forma directa a la lucha contra el cambio climático. En esta línea, Greenalia ha seguido avanzando hacia una reducción progresiva de su huella de carbono y alcanzar la neutralidad climática. Las acciones en pro de la biodiversidad, el consumo 0 de plásticos de un solo uso y la reducción progresiva de residuos en oficinas avanzan en su implantación.